EFESIOS 3:14-21

EL PODER DE DIOS EN TU VIDA

¿Has pensado a veces que es extraño que Dios ha actuado con tanto poder en las vidas de ciertas personas, pero que en tu vida no ves evidencias del poder de Dios?  Eso nos puede ocurrir a todos, y el apóstol Pablo estaba consciente de esto cuando escribió a los efesios.  Creo que al meditar el texto de Efesios 3:14-21, veremos algo de lo que Dios puede y quiere hacer en nosotros, y alguna indicación de cómo aprovecharlo.

“Por esta causa doblo mis rodillas ante el Padre de nuestro Señor Jesucristo, de quien toma nombre toda familia en los cielos y en la tierra, para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el  hombre interior por su Espíritu; para que habite Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y cimentados en amor, seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura, y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios.  Y a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros, a él sea la gloria en la iglesia en Cristo Jesús por todas las edades, por los siglos de los siglos. Amén.”

El deseo de Pablo para los efesios es que experimentan y entiendan qué es el poder de Dios que opera en ellos.  Cada creyente puede experimentar el poder de Dios actuando en su vida entendiendo los principios que Pablo expone en Efesios 3:14-21.

I         Deben ser fortalecidos interiormente (v.16)

1)             No se trata necesariamente de señales externas

2)             Es muy distinto del poder mágico que el mundo busca

3)             Cuando una persona es interiormente fuerte, puede prescindir de muchas otras cosas

4)             Dios utiliza a una persona que sea interiormente fuerte, aun que sea débil físicamente, y aun mentalmente. (2 Co. 5:1-2…; 2 Co. 12:7-9)

5)             Esta fuerza interior vence aun cuando no hay señales exteriores, aun cuando no hay dinamismo exterior, aun cuando no hay grandes capacidades aparentes.  Esto no para despreciar esas cosas externas, pero no son imprescindibles.

6)             ¿Cómo es tu vida interior?  ¿Andas en una comunión libre con el Señor?  ¿Está todo bien interiormente, donde nadie más ve? Tendremos que ver en qué consiste esta fuerza.

II      Deben poner su atención en la grandeza del amor de Cristo (v.17-18)

1)             Es interesante que este fortalecimiento que Pablo menciona no dirige la atención a unas señales externas sino en el conocimiento del amor de Cristo.

2)             Pablo habla de la capacidad de “comprender”.  Esto es algo más que un mero conocimiento intelectual.  Se trata de poder absorber en su vida diaria este conocimiento.

3)             Lo que hay que comprender

i         es la grandeza del Señor,

ii       y el amor de Cristo.

4)             Debemos preguntarnos cuándo fue la última vez que contemplamos la grandeza de Dios y el amor de Cristo en todos sus aspectos.  Paro además de contemplarlo, es importante que esto sea traducido en neustras actitudes, nuestras reacciones, tanto en el mundo como en la iglesia y en nuestra vida personal.

III   Deben aumentar sus expectativas (v.20)

1)             Pablo habla de lo que Dios puede hacer.  Creo que hay la implicación de lo que Dios quiere hacer también.

2)             Nuestra visión de Dios puede ser demasiado pequeño.  Esperamos muy poco de él.  Eso no lo glorifica.

3)             “Ensancha el sitio de tu tienda, y las cortinas de tus habitaciones sean extendidas; no seas escasa; alarga tus cuerdas, y refuerza tus estacas” (Is. 54:2).   También la petición de Jabes en 1 Crónicas 4:10.  Él se atreve pedir bendición a Dios porque tiene una idea de la grandeza y del amor de Dios.  cuando no pedimos es porque no creemos que Dios puede, o porque no queremos que Dios quiere – es decir, no creemos en el amor de Dios.

4)             Santiago dice, en Stg 4:1, “No tenéis porque no pedís”.  Jesús dice: “Hasta ahora, nada habéis pedido en mi nombre; pedid, y recibiréis, para que vuestro gozo sea cumplido”. 

5)             ¿Hay algo que te gustaría que cambiara en tu vida?  ¿En tu manera de ser?  El Señor te invita a confiar en él, a pedírselo.  Puede ser que estarás asombrado de lo que él hará – más aun de lo que pides o piensas.

IV   Deben entender que este poder ya actúa dentro de nosotros (v.20)

1)             El creyente no necesita esperar algo externo.

2)             Tampoco necesita envidiar al otro a quien parece que Dios bendice o utiliza más que a él.

3)             Es importante descubrir que este poder ya está en nosotros y opera dentro de nosotros.

i         No es nuestra fuerza interior.

ii       Es Dios que actúa en nosotros.

4)             Hemos de dejar que él haga su voluntad en neustras vidas, y esto viene de una plena entrega por fe.

Dios está capaz de actuar poderosamente en nuestras vidas, tanto para transformarnos como para utilizarnos.  Además, Dios quiere actuar así en nuestras vidas.  Se trata, pues, de que nosotros creamos esto, y de que nosotros queramos esto.  Aprendamos a confiar en él plenamente, atreviéndonos a pedirle grandes cosas.