UN CORAZÓN DISPUESTO
ÉXODO 35:5, 21, 22, 26,
29; 36:2, 3b
A
veces uno se pregunta qué es lo que hace funcionar a un cristiano fiel. ¿Qué
hace que un cristiano sea dispuesto a dar no sólo el diezmo, sino otras
ofrendas al Señor, mientras otro creyente ni siquiera está dispuesto a poner el
diezmo? Uno está dispuesto a renunciar a
muchas cosas para el Señor, mientras el otro ni siquiera puede renunciar a unas
tonterías para el mismo Señor. Un
creyente está dispuesto a trabajar mucho para el señor, mientras al otro le
parece una cosa tremenda dar un poco de tiempo y esfuerzo para la obra del
Señor. ¿Qué es lo que hace la
diferencia? Un pastor definió bien el
problema cuando el reloj de la iglesia no daba la hora correcta. Puso un cartel por debajo, que decía: “NO
CULPES A MIS MANOS: EL PROBLEMA ES MÁS PROFUNDO”. El problema estaba al centro, en la
maquinaria al corazón del reloj.
¡Es
el CORAZÓN que hace la diferencia! Es la VOLUNTAD , el QUERER, ya que el corazón es el
centro.
¿Cómo
está tu corazón hoy? ¿Te has fijado que en el pasaje que hemos leído, hay siete
referencias a la voluntad o al corazón, para el servicio de Dios? Fijémonos en que el corazón de esa gente
estaba bien dispuesto. ¡Quién sabe lo
que Dios podría hacer con unos corazones bien dispuestos! Miremos por qué su
corazón estaba bien dispuesto, en qué su corazón estaba bien dispuesto, y
contemplaremos también los resultados que ello podría producir ahora nosotros.
I. CÓMO O POR QUÉ SU CORAZÓN ESTUVO BIEN DISPUESTO
1.
Escuchando la ley del Señor (35:1,3)
Josué 1:8
2.
Cantando alabanzas al señor (Ex. 15; Sal 135:1,4)
3.
Manteniéndose juntos (estaban reunidos en el
desierto) Hch 7:38; Hch 2:42-47
4.
Estando en la presencia de Dios
5.
Ejerciendo su corazón bien dispuesto, poniendo su buena
voluntad a la obra (1 Co. 15:58)
II. EN QUÉ SU CORAZÓN ESTABA BIEN DISPUESTO
1.
Ofrendas
35:5,21,29, 36b ¡4 veces! Y 36:5 ¡“Mucho más”! Como los filipenses.
2.
Hay un poco de miedo en cuanto a predicar el diezmo.
Creo que eso es juzgar mal a los creyentes.
3.
Renuncios 35:2 Mr 8:34
¡Nos parece difícil renunciar! Si
una iglesia quiere extenderse, se necesitará más que ofrendas: se necesitará
sacrificio, renuncio.
4.
Trabajo 35:26;
36:2 (Romanos 12:3-8)
III. LAS CONSECUENCIAS, PARA NOSOTROS, DE UN CORAZÓN
BIEN DISPUESTO
1.
Una carga para las almas Ro. 10:1; 2 Co. 6:11
2.
Una cosecha de almas Sal 116:6. ¿qué hace que una iglesia tenga éxito en el
evangelismo? ¡Poniendo el CORAZÓN en el
evangelismo!
¿Dónde está tu corazón en este momento? ¿Cómo está tu corazón? ¿Está totalmente entregado al Señor? ¿Está tu corazón bien dispuesto? ¿Quieres
entregar algo al Señor? ¿Quieres entregarle otro rincón de tu corazón, algún
rincón que hasta aquí no estaba bien dispuesto? Tú sabes de qué se trata. ¿No quisieras
ofrecerle, entregarle, eso al Señor hoy?
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