CIUDADES DE REFUGIO: JOSUÉ 20

CIUDADES DE REFUGIO: 

UNA IMAGEN DE JESÚS

JOSUÉ 20

Como Cristo:  santificados, y un lugar para refugiarse del juicio.

El homicidio involuntario:  como el pecador de hoy; no puede cambiar nada, aun si lo quisiera.  Necesita gracia.

I.              Al alcance de todos  (accesible)  Mt. 11:28; 18:20; 28:20; Fil. 4:9b; He. 4:14-16; 6:18; 10:19-22)

1.                 Costaba media jornada caminando, a lo máximo, para alcanzar una de esas ciudades.

a.                  Kedesh al norte

b.                 Sechem en medio

c.                  Hebron al sur

2.                 Eran ciudades levitas: la enseñanza de la Palabra de Dios era accesible para el refugiado.

3.                 Cristo es accesible, su Palabra es accesible, y su salvación es accesible. Romanos 10:6-8; 13

4.                 Nosotros también debemos ser accesibles para aquellos que necesitan a Cristo.

II.           En un monte, para ser visible (v.7) – visible, publicado.  (Mt. 5:18; Ro. 10:18; Jn. 8:12)

1.                 Cualquier persona podía encontrarla, aun en la noche, viéndola desde lejos.

2.                 El Evangelio, publicado por todo el mundo, en todo idioma.

3.                 Cristo tiende el brazo hacia todos, y envía a los suyos hacia todas partes

4.                 Es nuestra responsabilidad de ser visibles.  Mt 5:14; 28:19-20 y hacer que Cristo sea visible en nosotros.

III.        Los nombres representan las cualidades de Jesús

1.                 Kedesh  =   santo

2.                 Sichem  =  Hombro  Is. 9:5

3.                 Hebron  =  Comunión  1 Jn. 1

4.                 Betser  =  fortificación, fortaleza

5.                 Ramoth  =  Alto, elevado, exaltado  Fil. 2:9

6.                 Golan  =  gozo, alegría, gloria

7.                 Es en Cristo, que es santo, y que es el Hombro en que descansa el gobierno del universo, que hallamos nuestro refugio. Es en este refugio que somos llamados a su comunión.  Él es la fortaleza de todos aquellos que buscan en él su refugio.  Él ha sido exaltado a la diestra del Padre para ser nuestra liberación, y es en él que todos los santos se glorían. Él es nuestro gozo.