EL SÉPTIMO SELLO
(O LAS SIETE TROMPETAS)
Apocalipsis 8 - 9
Trataremos estos dos capítulos
primero observando lo que se presenta allí, y luego haciendo unas
interpretaciones generales, y aplicaciones a nuestras vidas de hoy.
I.
OBSERVACIONES:
1. LA SOLEMNE PREPARACIÓN vv.1-5
i.
v.1 en el Cielo un silencio de @ media
hora. véase Zacarías 2:13 "Calle toda carne delante de Jehová; porque Él
se ha levantado de su santa morada.
ii.
v.2 Siete Trompetas dadas a siete ángeles que
están de pie delante del trono de Dios.
(Todo lo que sucederá a continuación está bajo el control de Dios.)
iii.
v.3 Un incensario de oro aguantado por otro ángel:
se le dan incienso y él les ofrece con las oraciones de todos los
santos (5:8) Les ofrece sobre el altar y delante del trono.
iv.
v.4 Se ve que las oraciones de los santos son
aceptados por Dios.
v.
v.5 El incensario es llenado del fuego del altar,
y echado a la tierra, causando truenos, voces, relámpagos, y un terremoto. )Puede ser que los desastres que siguen sean el
resultado de las oraciones del pueblo de Dios?
Nuestras oraciones para el bien de la gente se vuelven en su maldición
si no se arrepienten.
2. SUENAN LAS TROMPETAS 8:6 - 9:21
i.
v.7 Primera Trompeta: granizo, y fuego mezclado
con sangre, lanzado sobre la tierra. 1/3 de la tierra quemada, 1/3
de los árboles quemados, y toda hierba verde quemada después.
(Notemos que la destrucción está limitada todavía a la tercera parte. Todavía no es el fin. (La misericordia de Dios! 2 Pedro 3:9
ii.
v.8-9 Segunda Trompeta: la montaña de
fuego echado en el mar: 1/3 de la vida marítima perece:
agua en sangre, seres vivientes, y naves.
iii.
v.10-11 Tercera Trompeta: la estrella
"Ajenjo" echado en los ríos y las fuentes de agua (la tercera parte)
y estos son envenenados, causando muchos muertos.
iv.
v.12 Cuarta Trompeta: la tercera parte del sol, la
luna, y las estrellas herida. Día y
noche pierden la tercera parte de su luz.
v.
v.13
Introducción de Las tres
"ayes" v.13, 9:1-21; 10:1 - 11:19 que son las tres últimas
trompetas. (Se tratará del tercer
"ay", o de la séptima trompeta, en una sección aparte sobre los
capítulos 10 y 11.)
vi.
9:1-12
Quinta Trompeta: Una estrella cae del cielo sobre la tierra, y
abre el pozo del abismo. Los seres que
salen del abismo para atormentar a los hombres tienen por rey a Abadón, o
Apolión, lo que significa "Destructor". v.11 Estudiantes Bíblicas de los siglos pasados
han sugerido la posibilidad de que se tratara del obispo de Roma que cae en un
mundo secular y desencadena muchas
doctrinas monstruosas en el mundo. Los
que tienen el sello de Dios en la frente (el sello del Espíritu Santo) no
serían tocados por esas doctrinas.(9:4)
Hoy, no es de moda tomar esta interpretación, pero tampoco se ha
sugerido otra idea plausible.
vii.
9:13-21
Sexta Trompeta: El trompeta del gran Río Eúfrates. Un ejército de dos millones subidos en
caballos con cabezas de leones de cuya boca salen fuego, humo, y azufre. Como resultado mueren la tercera parte de los
hombres de la tierra. Con todo esto no
se arrepienten los hombres, y siguen en sus pecados y su desprecio de Dios.
viii.
10:1
- 11:19 Séptima Trompeta: El misterio de
Dios se consuma 10:7; El reino entregado eternamente al Señor 11:15-17; La ira
de Dios; Los muertos juzgados 11:18; Los siervos, los profetas, los santos,
reciban su recompensa 11:18; El templo de Dios en el cielo está abierto 11:19
(véase también 14:6-20).
II. UNAS
INTERPRETACIONES GENERALES
No hay ningún indicio que estas
trompetas estén en orden cronológicos, aparte del hecho que la última introduce
el fin del tiempo. Se podría considerar
que se encuentran en orden de importancia, y algunos pueden ser simultáneos.
Los seres monstruosos descritos no
parecen ser una descripción literal de seres que hayan aparecido, ni que
aparecerán. Hay que acordarse que son una
descripción literal de lo que Juan vio en su visión, pero que significan
algo, como las estrellas y los candeleros de oro significaban otra cosa en el
capítulo 1.
El río Eúfrates puede ser simbólico
o literal. Es interesante notar que la
descripción de la sexta trompeta nos da algo parecido a una guerra con armas
químicas, y Iraq, donde se encuentra el Eúfrates, el país el mejor armado de
todos los países árabes, se jacta de tener un arsenal químico, y amenaza quemar
la mitad de Israel.
El hecho que los hombres no se
arrepientan tras la sexta trompeta demuestra que el arrepentimiento no
es el resultado de las circunstancias idóneas: sólo el Espíritu de Dios obrando
en los corazones puede producir el arrepentimiento.
Es también interesante notar las
alusiones al fin en la última trompeta.
Esto significa que Jesús entra en su reino eterno, y no
milenario; que viene el juicio de los incrédulos al mismo tiempo que el
galardón de los justos. No ocurren en
distintas etapas como muchos quisieran creer.
Los
"ayes":
i.
el
primero podría ser lo que Bonifacio, el primer papa, desencadenó sobre el mundo
cuando presentó doctrinas que eran hermosas de ver, pero que tenían colas de
escorpiones, y que mordían a todos aparte de los elegidos.
ii.
el
segundo podría ser los ejércitos de Islam que invadieron a Europa en la edad
media. Sabemos que la Europa Católica
era culpable, y que nunca se arrepintió de:
idolatría, homicidio, encantamientos, fornicación, y robos
(enriqueciéndose a cuentas de las naciones, mientras predicaba el
"amor" con tanto cinismo).
III. APLICACIONES
PARA NOSOTROS
Donde se predica el evangelio a un
pueblo, y aquellos no lo reciben, hay generalmente unos juicios terribles que
siguen.
Antes de enviar castigos, Dios avisa
a los hombres por los medios siguientes:
i.
la Palabra escrita
ii.
predicadores
iii.
sus propios conciencias
iv.
los signos de los tiempos
Por lo tanto, si los hombres son
sorprendidos por el juicio, es por su propia culpa.
La ira de Dios contra un pueblo es
una cosa espantosa. Aun sus comodidades y lujos se vuelven contra ellos. La vida misma llega a ser amarga.
Dios no vierta toda su ira en
este época. Pone límites aun a sus más
terribles castigos.
Aun cuando los hombres ven los
resultados espantosos de sus pecados, no se arrepientan (Ap.9:20-21). Como en
el caso del SIDA hoy en día. "Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; )quién lo conocerá?" (Jeremías 17:9) (No hay nada nuevo! El hombre de hoy es igual al
faraón de Egipto tras las diez plagas. Aquellos
que se rebelan contra la Palabra de Dios
no se arrepentirán cuando venga el castigo
de Dios.