¡Amalec!
Éxodo 17:8-16
Para
entender este bosquejo hay que leer el texto.
Amalec
ha sido considerado como una imagen o tipo de la carne, el “yo” contra el cual
hay que seguir luchando. Al menos tenemos allí una buena ilustración de
cómo combatir en cualquier batalla espiritual.
Usando
esta historia como ilustración, encontramos seis principios importantes para
nuestras propias luchas internas.
Cada
creyente tiene que seguir el ejemplo de Moisés en combatir contra la carne o el
"yo".
I. Tiene que luchar v.9-10
1)
Véase también 2 P. 1:5-7
2)
Algunas personas quieren quedar sin hacer nada, esperando que Dios les
libere. La fe es dispuesta para actuar, confiando que Dios le llevará al éxito,
o al menos según su plan.
3)
El esfuerzo no significa una falta de fe. A veces puede significar la
confianza.
4)
Lo importante de la fe es que nos empuje, o motiva, a obedecer.
II. Tiene que depender de Dios v.10b-11
1)
Gá. 5:16
2)
Gá. 6:14
3)
Juan 15:5 "separados de mí nada podéis hacer"
4)
Podían hacer todo lo que podían, todo lo que quisieran, pero sin la
intervención de Dios, iban a perder la batalla. Es lo mismo con nosotros. No
podemos contar con nuestros esfuerzos sólo. Los hacemos, pero dependiendo de
Dios.
III. Tiene que depender de los hermanos v.12
1)
He. 10:24-25
2)
Desde el principio, Dios dijo que no era bueno que el hombre sea solo.
3)
El que no quiera contar con los hermanos es culpable del mismo pecado
del que no quiere contar con Dios. Se trata del orgullo.
IV. Tiene que ser una lucha sin piedad v.13
1)
Gá. 6:7
2)
Romanos 13:13.14 "no proveáis para los deseos de la carne".
3)
Dios no quería que dejaran ninguno de los de Amalec vivos. Porque
Amalec iba a ser una problema para ellos durante muchos siglos después.
V. Tiene que ser con la seguridad del juicio de Dios contra la carne
v.14-16ª
1)
Ro. 8:6-8, 37
2)
¿Qué tiene que ver eso con la batalla contra Amalec? Pues, lo mismo
que tenía que estar seguros que Dios ya había juzgado a Amalec, que eran, no
enemigos suyos, sino enemigos de Dios, de la misma manera debemos mirar nuestra
carne, nuestro “yo”.
VI. Tiene que ser con la vigilancia continua v.16b
1)
¿Cuántas veces dijo tanto Jesús como Pablo, y Pedro:
"velad"?
2)
A Getsemaní dijo Jesús:"Velad y orad, para que no caigáis en la
tentación".
3)
Igual como Moisés tenía que mantener sus manos levantadas ante Dios,
de la misma manera nosotros tenemos que manteniéndonos vigilantes en la
presencia de Dios, contra el enemigo: el pecado.
No comments:
Post a Comment