¿Qué es lo que le puede destruir?

¿Qué es lo que le puede destruir? I Timoteo 1:1-11

El suicidio y matanza de unas 1000 personas en Jonestown, Guyana, en 1978, nos recuerda los crímenes y las monstruosidades que se cometen a veces en nombre de la religión. Po esa razón, es muy importante que sepamos reconocer los falsos cultos para poder evitarlos y también avisar a otras personas al respecto.

Parece haber cuatro cosas mencionadas en este pasaje que pueden destruir una iglesia, o una vida cristiana individual. Son también señales de un falso maestro. Si verificamos a cada maestro a la luz de estas cuatro medidas, podremos seguramente evitar de caer en la trampa de « doctrinas de demonios » mencionadas en I Timoteo 4 :1.

I.    La enseñanza de « diferente doctrina » v.3

1.                 Pablo quiere que Timoteo advierte a ciertas personas a que no enseñen « diferente doctrina ».

2.                 Si alguien tiene « algo nuevo » que enseñar, usted tiene que ser vigilante : ¿lo dice la Biblia, claramente? ¿Puede decir que es verdaderamente la intención del mensaje bíblico?

3.                 Joseph Smith llegó con una « nueva revelación» - el libro de Mormon. La Biblia, para él, era la Palabra de Dios, pero esa nueva revelación también lo era, para completarla. Su enseñanza acabó contradiciendo prácticamente todo lo que la Biblia nos enseña.

4.                 Mary Baker Eddie vino con una « nueva revelación» también: ella, o uno de sus correligionarios, habría visto el mandamiento sobre el séptimo día envuelto en luz!  Ella también acabó dando una enseñanza que contradice mucho de lo que el evangelio nos enseña.

5.                 Cuando, pues, alguien viene hacia usted con « algo nuevo » que las iglesias « han dejado de enseñar », tenga cuidado!

II.  Preocupación (obsesión?) por las fábulas y las genealogías v.4

1.                 Son cosas que no contribuyen absolutamente nada para avanzar la obra de Dios en la fe

2.                 Hay muchas cuestiones y especulaciones que pueden ser muy interesantes, pero podemos perder mucho tiempo en ello!

a.                 Según la Biblia, ¿podría haber vida en otras planetas?

b.                 ¿Podría haber vida inteligente en otras planetas?

c.                  ¿Qué son los OVNI (objetos volantes no identificados)?

d.                 ¿Es posible que ciertas etnias europeas sean en verdad descendientes de los diez tribus nórdicos, separados, de Israel?

3.                 Son todas preguntas absolutamente inútiles, pero que causan unas discusiones muy reñidas, y hasta divisiones. Y, sin embargo, ¡no avanzan nada!

4.                 Generalmente, empezamos a obsesionarnos de esas cuestiones cuando hemos empezado a perder interés en el mensaje fundamental de la Biblia : ¡cansados de siempre comer la misma maná!

5.                 Asegúrese de que siempre permanezca apasionado del evangelio.

III. Una mala comprensión de la ley y de su propósito v.5

1.                 Énfasis en la abstención de ciertos alimentos (4 :3)

2.                 ¿Han oído alguna vez el dicho : « Deje que le guía su conciencia »? Tanto la Biblia, como la experiencia humana, lo hacen claro que no podemos siempre depender de esa voz interior. Las Escrituras hablan de conciencias que están manchadas. Hay gente, enseñada así por su religión, que creyeron que demostraban una gran devoción a Dios al sacrificar a sus propios niños a su Dios.  Hay gente aquí que roban y asesinan, pretendiendo a sí mismo que están haciendo el bien. Obviamente el sentido moral del hombre natural no es una guía infalible! A pesar de aquello, el creyente no debe dejar de escuchar aquella pequeña voz interior de la consciencia. El Nuevo Testamento nos habla más de una vez de « una buena consciencia ». Es importante en una vida de santidad.  Aquí se menciona en relación con un corazón puro y una fe sincera.  Pero esta facultad que Dios nos ha dado, pues el Espíritu santo tiene que purificarla continuamente y alimentarla en medio de nuestro caminar diario con el Señor. Por eso es tan importante alimentarse diariamente con la Palabra de Dios y una relación constante con el Señor. (¡No basta lo que usted recibe en las reuniones de la iglesia!)

3.                 ¿Qué, según la Palabra de Dios, es el verdadero propósito de la ley? ¡Un amor nacido de un corazón limpio, y de buena conciencia, y de fe no fingida!

4.                 ¿Se fía usted de su propio sentido moral, su propio sentido de responsabilidad, su propio sentido común para avanzar en la vida? ¿Piensa usted que no necesita leer la Biblia regularmente y cultivar una relación íntima con el Señor, para vivir la vida cristiana? Seguramente ha oído hablar de personas que salen con la intención de cruzar un lago, o un bosque, y ¡que se hallan a su punto de partida unas horas más tarde! ¡Caminaron en círculo!  Habrían tenido que consultar una brújula. 

5.                 De la misma manera, si intentamos vivir nuestra vida cristiana sin consultar regularmente la Palabra de Dios, tomamos el riesgo de perdernos también. Debemos confiar en la Palabra de Dios en vez de nuestro propio sentido interior de bien y de mal. Nuestra conciencia debe ser continuamente alimentada por la Palabra de Dios y una relación con Dios.

IV.  La pretensión de poseer un conocimiento exclusivo y superior (1 :7)

1.                 Tengamos cuidado con aquellos que se autoproclaman « maestros » o « doctores » de la Palabra

2.                 ¡Tengamos cuidado con aquellos que parecen pensar que lo saben todo!

3.                 Conocemos eso de intentar trabajar con un « sabelotodo »! ¡Es prácticamente imposible! No se le puede enseñar, ¡es intratable!

4.                 Tengamos cuidado, también, con aquellos que vienen anunciando su don particular. ¡Quieren hablar de ellos mismos en vez de hablar de Jesús!

5.                 Si bien hay que respetar a cada persona por sus calidades, ¡no hay que dejarse impresionar por nadie! ¡Sobre todo por alguien que quiere impresionarnos! ¡Que Jesús sea el único que nos llene!

"No hay ningún sustituto por la Palabra escrita de Dios. No importa cuán preciosa una palabra personal puede ser para nosotros, no importa cuán “en la onda” un una percepción nos pueda parecer, no se puede comparar con la Palabra escrita. He visto demasiados cristianos inmaduros corriendo detrás alguna "revelación" y llegar a ser muy extravagantes porque no son arraigados y fundados en las Escrituras." - John Eldredge

Hay, pues, peligros, tanto para la iglesia como para el individuo. Está usted en peligro de alejarse de la meta que el Señor ha puesto para su vida. Está en peligro de alejarse de su primer amor. Pero no es necesario en absoluto que usted se aleje. Se trata simplemente de caminar con los ojos abiertos, de estar consciente de los peligros, y de no permitir a nada que confunda su visión espiritual.