Wednesday, April 1, 2015

Jueces 9:1-7 ABIMELEC

ABIMELEC
o
EL AFÁN DE DOMINAR

Jueces 9:1-7

La historia de Abimelec es una historia de política.  Una historia de política regionalista, e interesada.  Una clase de política que no debe existir entre el pueblo de Dios.

La historia de Abimelec nos habla de un afán de un liderazgo que contrasta radicalmente con el liderazgo que Jesús presentó en Marcos 10:35-45 - el liderazgo que está allí para servir.


I.                  EL AFÁN DE LIDERAZGO  Jueces 9:1-3
           1.                  Abimelec fue a su familia y a sus vecinos en Siquem
           2.                  Jacobo y Juan fueron a Jesús  Mr 10:35-37, 40
          3.                  Es mejor pedir a Dios que a los hombres: es más honrado, y el resultado generalmente sale mejor.

II.                  EL COSTE DEL LIDERAZGO  Jueces 9:4-6
           1.                  Para Abimelec costó la vida de sus 70 hermanos y quienquiera se opusiera
           2.                  Para los que serían líderes con el Señor, cuesta su propia vida.  Mr 10:38-39
           3.                  Hay una diferencia entre sacrificarse a sí mismo para los intereses del Señor y de los demás, y sacrificar a otros para sus propios intereses.
           4.                  Puede ser la diferencia entre sacrificar tu reputación o sacrificar la reputación de los demás.  O puede ser una cuestión de comodidad.

III.                  EL PROPÓSITO DEL LIDERAZGO  Jueces 9:2b y 6
           1.                  Para Abimelec, era un propósito interesado; ser rey; enriquecerse; tener más poder; dominar.
           2.                  Para Jesús, era servir Mr 10:45
           3.                  Para nosotros, ha de hacerse más pequeño, y engrandecer a otros Mr. 10:42-44
           4.                  No se trata de dominar, o tener señoría, sino para cumplir con la tarea que el  Señor ha dado  1 P. 5:1-4


El estilo de liderazgo del Señor, el liderazgo cristiano, es muy distinto del liderazgo del mundo.  Es la diferencia entre el servicio y el egoísmo.  La diferencia entre glorificarse a sí mismo y glorificar al Señor.  No debemos hablar en contra de los que nos gobiernan, o difamarles, pero sabemos que muchos de los que gobiernan son acusados de corrupción; de enriquecerse mediante su posición, o adelantar sus propósitos personales enriqueciendo a otros que pueden ayudarles.  No creo que debemos necesariamente creer todas las acusaciones de corrupción sin más.  Por otro lado, sabemos que es la manera del mundo.  Es la manera del hombre.  Cuando alguien tiene una posición de poder sobre otros, la gran tentación, que se pone cada vez más fuerte, es aprovechar de ello personalmente.  ¿Que lección hay para nosotros?  ¿Para cualquier creyente?  Es que debemos analizar constantemente nuestras motivaciones en cualquier cosa: ¿por qué lo hago?  ¿Para mis propias ventajas?  ¿O para servir en la causa del Señor, y servir a los demás?

No comments:

Post a Comment